jueves, 2 de octubre de 2014

Imágenes del levantamiento y la rendición












Mohamed Alí Seineldín



Días después del motín, ya con los detenidos encarcelados y las penas en proceso el Presidente Carlos Menem pasea por el jardín de la quinta de Olivos con el ministro de Defensa Humberto Romero y con el embajador argentino en Naciones Unidas.


Juicios

Ya consumados tres alzamientos militares y realizado, el gobierno de Menem impulsó la extensión de la ley de Obediencia Debida a todo el personal militar excepto los miembros de la Junta, amnistía para los procesados por los alzamientos anteriores, e impunidad para todos los participantes en éste excepto Seineldín, quien fue procesado y detenido.




 Seineldín permaneció detenido y procesado, hasta que con el cambio de gobierno Carlos Menem le otorgó el indulto.
Pese a los recientes indultos  que incluyó a condenados, detenidos y procesados por terrorismo de estado, alzamientos "carapintadas" y guerra de Malvinas y a jefes de las organizaciones político militares de la década del 70', Seineldín rompió relación con Menem y fue puesto bajo arresto militar. Planeó una rebelión que se materializó el 3 de diciembre de 1990, en protesta contra la creciente injerencia del poder político en la cúpula militar.

Luego del tercer alzamiento, pocos días más tarde del mismo, Menem completaría los indultos, dando la libertad a los miembros de la Junta y otros militares y civiles, varios de ellos condenados a prisión perpetua: Jorge Rafael Videla, Emilio Eduardo Massera, Roberto Eduardo Viola, Ramón Camps, Guillermo Suárez Mason, el ex ministro de Economía José Alfredo Martínez de Hoz y el ex jefe de la Policía Federal Argentina Ovidio Ricchieri. Sólo Seineldín, permaneció en prisión a consecuencia de los incidentes hasta mayo de 2003, cuando fue indultado por el presidente interino Eduardo Duhalde.






La pena de muerte fue un tema sobre el tapete pero la justicia lo desestimó.

Antecedentes

En 1987 y en 1988 se habían dado alzamientos de los carapintadas, pero ninguno había sido tan virulento ni con tantas víctimas como el acaecido en 1990.
Mohamed Alí Seineldín fue uno de los líderes del alzamiento militar, con el cargo de coronel de las fuerzas armadas mantuvo una comunicación previa al alzamiento con el Presidente de la Nación Carlos Menem.

El senador Eduardo Menem reveló en ese entonces que el gobierno sabía que los carapintada preparaban un levantamiento. El senador declaró que "el Gobierno disponía de información sobre la posibilidad de que se registraran los acontecimientos ocurridos". La anterior declaración instala la cuestión siguiente ¿el Gobierno podría haber prevenido el ataque?
Agregó a su declaración lo siguiente "hay cosas que se pueden hacer por anticipado y otras no."





En el interior del edificio Guardacostas se dio uno de los enfrentamientos más violentos.



miércoles, 1 de octubre de 2014

El día que empezó todo



A raíz de los juicios que se emprendieron contra los responsables del terrorismo de Estado durante la última dictadura militar, entre 1987 y 1990, un sector del Ejército –conocido como “los carapintadas”– realizó una serie de alzamientos que hicieron tambalear la estabilidad democrática que tanto había costado conseguir.

Fuerzas militares de tipo comando dirigidas por un grupo ultranacionalista tomaron el 3 de Diciembre de 1990 la sede del Ejército por casi 18 horas las instalaciones del Regimiento I de Infantería, la fábrica de tanques Tamse, el Batallón de Intendencia 601 y otras unidades. Según los sublevados, sólo exigían la remoción del Jefe del Ejército Argentino y el repudio al desmantelamiento de las fuerzas nacionales por parte de Estados Unidos. La vísperas de la visita del entonces presidente George Bush fue otro de los detonantes. El alzamiento dejó un saldo de 5 civiles muertos, 8 militares muertos, 19 heridos y 331 detenidos entre civiles y militares.















Las cinco víctimas civiles se debieron a una maniobra de un tanque que atropelló un colectivo de la línea 60 cuando éste circulaba por la Autopista Panamericana.